Este lunes se llevó a cabo el entierro de 40 niños que perdieron la vida por cuenta de un ataque ejecutado por la coalición árabe liderada por Arabia Saudita. Al sepelio asistieron miles de personas que aprovecharon el momento para protestar en contra de la violencia que desde 2015 ha dejado cerca de 50.000 muertos en suelo yemenita.
Los ataúdes color verde, símbolo del islam, y con la foto de cada una de las personas asesinadas, fueron ubicados uno al lado del otro para luego enterrarlos en los huecos que días atrás adolescentes habían cavado para sus amiguitos.
Rebeldes en Yemen apoyaron rechazo de la ONU a ataque que mató niños
¿Qué opinas?